lunes, 28 de febrero de 2011

Fuckin' useless


Hoy he roto tus cartas.
Por fin he roto tus cartas.
Alguien me dijo que no era bueno vivir en el pasado, ¿adivina quién es ese alguien?
Pues sí, que gracioso, ahora aplico tu lección en ti. Qué fácil fue enamorarme cuando me encontraste débil y rota, ¿no? Qué sencillo lo viste, ¿no?...


Y ahora tú vas al mismo sitio que estos trozos de papel roto que una vez fueron simples palabras para describir un complicado sentimiento.


No, mentira.

Ellas van a la papelera de reciclaje.
directamente con toda la mierda que no sirve para nada.

-A.

sábado, 26 de febrero de 2011

Creo que no pido lo imposible. Creo...


¿Sabes qué es lo peor? Cuando te olvido.
Porque al darme cuenta de que lo he hecho, te recuerdo, y después no te vas con el viento, te quedas.
Aquí en mi mente.
Y ahora resulta inevitable querer compartir contigo mi euforia, compartir contigo mis lágrimas y que seas quien me de ese abrazo cuando más lo necesito.
Pero no quiero que seas , pero inevitablemente eres ese alguien que necesito aquí a mi lado, aunque haga creer que soy independiente y no necesito a nadie.




Necesito a alguien que esté a mi lado mientras lloro y no pregunte por qué lo hago.
Que tan solo me mantenga abrazada mientras formo ríos de gotas que caen de mis ojos, que no tenga cara de preocupación ni llore conmigo.
Que haga como si nada estuviese pasando, y que no mencione nunca ese momento, ni nunca pregunte la razón.
Tan solo quiero sentir tu presencia.
Y no, no quiero estar sola.

-A.

viernes, 25 de febrero de 2011

A mí me va llorar en silencio


Por fin. Terminó.
Se ha hecho eterno, ¿verdad?
Y ahora respira hondo.
Y guarda todo dentro de ti. Es siempre lo que has intentado, ¿no? Que nadie sea consciente de cuando derramas tus lágrimas.
Pero ahora fracasas. Fracasas. Fracasas... Y estallas.
Caen con la velocidad en la que explota una bomba, en la velocidad en las que un globo se va volando en cuanto lo sueltas, en un maldito abrir y cerrar de ojos.

Y ahora ves como una manada de personas vienen hacia ti.

No levantas la cabeza.

No quieres que nadie te vea.

En este momento te encantaría ser invisible.

Y cierras los ojos deseando que al abrirlos habrán desaparecido y respirarás hondo y sentirás una agradable sensación de alivio.
Pero levantas ligeramente la mirada y ahí siguen. Y no puedes diferenciar los rostros; entre las lágrimas y el rápido vistazo.
Pero de algo estás segura: la mitad de las personas que están ahí les da igual.
Pero esas personas insignificantes hacen que te sientas peor. Hacen que más personas te vean en ese patético estado que pretendías mantener secreto.
Y ahora te sientes peor...
Sí, muchas gracias (sarcásticamente) por gritarlo.

-A.

sábado, 19 de febrero de 2011

Se seca las lágrimas.
Suena la canción de 'She will be loved', eso espera: 'No me importa pasar todas los días en tu puerta bajo la lluvia. Busca a una chica con una sonrisa rota, pregúntale si se quiere quedar durante un rato, y será amada.'

Cómo es posible que tanto sentimiento de soledad quepa en una persona tan pequeñita...

Y cierra los ojos e imagina tu presencia, aquí junto a ella, poniéndole el brazo por encima y haciéndole sentir completa.

No, completa no,

lo siguiente.

Y que tonta sonrisa le sale...
Que estúpida eres, abre los ojos y seamos realistas. No está. No te va a hacer sentir llena. No tienes a nadie que te ponga el brazo por encima. No tienes a nadie que te abrace en momentos como estos. No tienes a nadie que te llame por las noches para hablar de cualquier bobería y cosas insignificantes, pero que te encantan esas conversaciones de las noches, nadie a quien contarle que hiciste en el día en inmenso detalle y que te escuche con atención, y te haga reír en las pausas. Nadie con quien quedarte callada y estar silenciosamente gritando cosas maravillosas. Nadie en quien te puedas acurrucar y escuchar los latidos de su corazón en silencio, cómodos y entrañables silencios.

No tiene nada de esto.

No te tiene a ti.


-A.



jueves, 17 de febrero de 2011

Lost paradise


-Ayer le vi.
+¿A quién tú y yo sabemos?
-Sí.
+¿Ah sí? Qué sorpresa, hacía tiempo que no me hablabas de él. Se nota que llevas esto mejor, se nota que le has superado.
Y lo dices con una sonrisa que quiere decir: estoy orgullosa de ti.
Más quisiera yo.
Se nota que lo has superado, dices. Pff...
Se nota que actúo bien. Se nota que he disimulado bien. Se nota que he fingido bien.
Se nota que he ocultado aquellos momentos en los que me encontraba contigo y mi corazón se disparaba y convertía todo dentro de mí en un caos. Salta a la vista que supe prevenir que fuesen detectables las ganas de expulsar estas lágrimas al verte, por todo lo que te echo de menos, por la forma en la que siento que todo entre nosotros ha cambiado. Es perceptible la forma en la que he tapado la leve sonrisa cuando mi brazo rozaba el tuyo; la mejor sensación del mundo. La sensación de aquel tiempo en el que éramos tú y yo, y hacia salir estas revoltosas mariposas en mi estómago.


No se nota,

pero yo lo siento aquí bien fuerte.



Siento con fuerza como te extraño.

-A.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Instantes preciosos


Es como una explosión de sensaciones.

De sensaciones agradables.

De sensaciones que me encantan.

Cuando tu mirada coincide con la mía,

como una fusión,

como parar el tiempo,

mi tiempo,

con un simple gesto.

Y mi sonrisa al recordarla.

Mi patética sonrisa al recordarla...
A cuántas personas habrás mirado así, y yo creyéndome tan especial, tan única, tan tonta...

Y es lo que tiene la ilusión, qué traicionera. Creer que todo lo que haces es porque me echas de menos, que cuando abrazas a otra chica, te gustaría que fuese yo. Que cuando besas a otra chica te encantaría que fuese mi sabor. Que cuando le susurras a otra chica al oído, te gustaría que fuese yo quien escuchase.

Desearías que fuese yo, ¿verdad?




A mí sí me encantaría serlo...

-A.



jueves, 10 de febrero de 2011

Tan solo tenerte a mi lado


Últimamente tan solo le sonrío al dentista- dijiste. Qué frase tan célebre viniendo de una niña de tan solo ocho años que creía estar enamorada de un chico rubio de ojos azules. Y yo, un chico de pelo marrón ondulado y despeinado, que desde pequeños siempre ha estado ahí para ayudarte, y siempre ha tenido este inquietante secreto, al que se le hace un nudo en el estómago al escucharte decir eso.
Me gustaría hacer algo.
Haría lo que fuera
. Lo que fuera por hacerte sonreír, por llevarte al parque más divertido de la ciudad y por hacerte vivir las aventuras más excitantes de tu vida.
Pero yo soy un niño al que le gusta explorar y comer galletas, y tú una chica con una sonrisa tan bonita como una flor en otoño. Qué sé yo que podría hacer para hacerte sentir feliz. Y de paso, quererme.
O hacerte ver que siempre estoy aquí.
Que quiero ser más que tu mejor amigo.
Quiero seguir trepando a tu ventana para ver a escondidas las pelis de miedo que tus padres no te dejan ver pero que después no me cojas la mano porque estás triste porque una niña te ha robado a tu mejor amiga.
Sé que no soy apuesto, no soy el niño más guay de la clase, y tampoco el que mejor juega al fútbol, pero soy el que más te quiere. El que cuando te hace reír sin querer no puede remediar reírse contigo y pensar lo afortunado que es de que sigas jugando con él a los tontos pero geniales juegos que nos inventamos pudiendo tener algo mejor que hacer. Pero tan solo porque soy tu mejor amigo.
Solo tu mejor amigo...

-A.