martes, 14 de agosto de 2012

Take my photo off the wall if it won't sing to you

No es un 'no es por ti, es por mí'. Creo que es un 'los dos'. 
Te fuiste. Te fuiste demasiado tiempo y me hiciste pensar. No soporto echarte de menos, me quita demasiada fuerza, y sabes que pocas cosas odio más que ser dependiente. Ya no salgo si no estás tú, y no encuentro nada útil si es sin ti, y eso me preocupa. Me ha dejado de gustar el helado de Nutella si no es de tus labios, y aunque salga más barato, también es preocupante. Mi necesidad de estar sola impide que pueda tenerte a mi lado, y creo que aún no sabes todo lo malo de mí, y no quiero que lo descubras, o si ya lo sabes, has sido la única persona capaz de enamorarse de ello, y no sé si yo seré capaz de querer tus contras junto a tus pros.
Sobre ti, bueno, no estoy dispuesta a pasarme el resto de mi vida sentada en un sofá. Necesito que alguien me saque a bailar, y tú no lo harías. Necesito a alguien que se porte mal y me haga reír sin pretenderlo. Alguien que le guste improvisar conmigo y saquemos planes de la nada un domingo por la mañana, no que tenga que planificarse con antelación y le cuesten los cambios. Necesito alguien que me dé sin esperar nada, que esté dispuesto a pensar en mí antes que en sí mismo, porque yo habría estado dispuesta a hacerlo por ti.
Sé que suena exigente, pero es que hay que poner numerosas condiciones para descartar al noventa y seis por ciento de la población masculina la posibilidad de entrar en mi corazón. A mí no me va eso de pensar en alguien. A mí no me va eso de echar de menos, de decir te quiero, de necesitar a alguien, de ser dependiente. 
Y quizá sí es por mí, tú lo único que has hecho mal es quererme demasiado. Perdóname por haber sido una mala elección.
-A.